domingo, 27 de diciembre de 2020

FRANK ZAPPA & THE MOTHERS OF THE INVENTION “Freak Out!”

 

(2 LP) (Junio 1966)

Reedición: Zappa Records

(2013)
Vinilo de 180 grms

Frank Zappa siempre fue un visionario. Mucho antes de los discos-concepto, Zappa ya se atrevería a mezclar para su primer trabajo todo tipo de influencias musicales: desde el Rock más salvaje hasta el Doo-Woop, el Rhythm & Blues, el Collage, Avant-Garde y por supuesto el Blues.

Comenzó en una banda llamada The Soul Giants, en la que hacían versiones Blues. Allí conoció a Ray Collins, un carpintero al que le gustaba cantar y que en los fines de semana interpretaba buen Blues en diferentes clubs. Ambos decidieron lanzarse al mundo de la música de forma más seria. Zappa cambió el nombre al grupo y con la adición de músicos como Jimmy Clark a la percusión, Roy Estrada al bajo y Elliot Ingber en la guitarra rítmica junto a las composiciones, voz y guitarra solista del propio Zappa formaron The Mothers of Invention 

Arropados por la producción de Tom Wilson y después de trasladarse a Los Angeles y haberles visto actuar por clubs de la ciudad, el grupo editó su primer álbum el 27 de junio de 1966. El disco se convirtió en el primer álbum debut doble de la historia del Rock y también en el primer álbum concepto, poco antes de la edición del “Sgt. Pepper´s” de The Beatles la cual se produciría solo unos meses más tarde. De hecho, y según ciertos comentarios, parece ser que Paul McCartney (que fue el padre y la madre de “Sgt. Pepper´s”) se basó en el concepto de este disco de Frank Zappa para lanzar el de la banda en 1967.

Más tarde el propio Zappa parodió esta idea (que no parece tan descabellada sobre todo teniendo en cuenta que este disco no tuvo ninguna repercusión comercial), en su disco de 1968 “We´re Only In It For The Money” (“Estamos En Esto Solo Por El Dinero”) donde se parodia la portada del “Sgt. Pepper´s Lonely Hearts Club Band” aparte de poseer todo el disco una fuerte carga crítica hacia los cuatro fabulosos.  

“Freak Out!” tuvo muchas críticas negativas en su momento. Desde comentar que estaba influido por las drogas (en especial el LSD), hasta alcanzar altas cotas de incomprensión como la del crítico Pete Johnson, de Los Angeles Time, quien llegó a decir de este doble álbum que era algo así como “el gran estímulo para consumir aspirinas desde la subida de impuestos”, o “si alguien se atreve, que me explique de qué va este disco”. Exabruptos que leídos hoy han quedado absolutamente anecdóticos y sobre todo anacrónicos sobre todo si echamos la vista atrás y nos detenemos en la obra de un músico de Rock amante del Jazz y de la música contemporánea.

Una obra que se extiende a 60 discos oficiales (sin contar los piratas, discos en directo y recopilatorios), en la que participó el mismo Pierre Boulez (músico y director de orquesta francés con quien trabajó Zappa en el disco “The Perfect Starnger” de 1984) y figura a la que incluso su ciudad natal, Baltimore, ha dedicado una estatua en su memoria, no nos pueden dejar indiferente.

Esta es la primera obra de un visionario. A partir de aquí hubo mucho y todo ello muy heterodoxo, como al propio Zappa le gustaba que le calificaran. Un hombre que incluso estuvo a las puertas de presentarse como candidato a la presidencia de Los Estados Unidos, que convirtió un juicio en una obra musical experimental (el juicio en el que se le juzgó por oponerse a la colocación de una etiqueta en los discos en la que se advertía al comprador de lenguaje obsceno o no apto para cierto tipo de público), sus críticas a toda la sociedad y en particular a los políticos y militares norteamericanos por los experimentos efectuados con las drogas sobre la población…la lista de actividades más allá de las específicamente musicales sería larga. Quizás los adjetivos que le definan mejor sean heterodoxo, iconoclasta y un gran innovador de todo lo referente al lenguaje musical tan poco definido en los años 1960s pero que con obras como “Freak Out!” nos acercan un poco a la idea de cómo estaba el mundo en esa época.   

La edición que nos ocupa se debe a una nueva reedición de toda la obra de Zappa gracias a su familia. Ha habido una nueva edición y remasterización de sus discos oficiales más algunos que nunca se habían editado y que corresponden a out-takes, tomas falsas y demos de temas de Zappa que se han agrupado en nuevos volúmenes. Los discos en Vinilo han sido editados teniendo en cuenta sus portadas y detalles originales aunque en este caso concreto se ha prescindido de una curiosidad que había en un primera edición: el mapa de ciertos restaurantes de Los Angeles a los que el grupo iba habitualmente a comer y a los que presuponemos Zappa dio coba para comer gratis a cambio de publicarles la dirección y la situación del mismo en un mapa en el interior del disco. Aparte de esto también había algunas frases alusivas a la Policía en las que se decía... “Además os apuntamos los lugares que están calientes frecuentemente, con consejos de seguridad en situaciones de terror policial”. Todo un heterodoxo a tener muy en cuenta. Si ya le conoces te invito a que disfrutes de estas nuevas ediciones en Vinilo. Si no, aún no es tarde para descubrirlo.

sábado, 26 de diciembre de 2020

BOB DYLAN “Bringing It All Back Home”

 

Reedición: Music On Vinyl
(2010)
Vinilo de 180 grms

A menudo se cita este álbum como el del nacimiento del Folk-Rock. Realmente fue así. Dylan en 1965 estaba rodeado de grupos y solistas que ya hacían versiones de sus propios temas pero sin la simplicidad instrumental de los instrumentos acústicos. La guitarra eléctrica marcaría en los años 1960s –y sobre todo en los 1970s- las pautas a seguir por muchos instrumentistas, solistas y grupos de Rock. 1965 fue el año de publicación de “Rubber Soul” de The Beatles, del “Mr. Tambourine Man” de The Byrds o en el campo del Jazz del “A Love Supreme” de John Coltrane. Tres discos fundamentales para comprender la evolución musical del siglo XX. Dylan en esa época se mostraba remiso a dar el salto a lo eléctrico. Sobre todo teniendo en cuenta opiniones enfrentadas al respecto como la de su amiga Joan Baez quien no era partidaria de electrificar lo natural. Y es que el purismo es una espada de doble filo. Si eres cantante Folk y tu meta es denunciar una situación social poco sostenible –en ese año en América había mucho por lo que luchar- debías mantener ese espíritu libre que te da lo acústico, lo natural, lo no contaminado. Fueron tiempos difíciles para Bob Dylan. Su casa se le llenaba de tipos a los que no conocía. Simplemente querían estar cerca de su ídolo. Recibió serias amenazas de muerte al cambiar la acústica por la eléctrica, tuvo que mudarse en innumerables ocasiones de domicilio, sus antiguos seguidores, en definitiva, no le perdonaban que se hubiese “contaminado” por unas circunstancias que consideraban una moda pasajera. Para el purista hay que ser Folk de guitarra acústica hasta que te mueras. Afortunadamente para el mundo de la música su cambio hacia lo eléctrico no supuso, como temían algunos, el final a la crítica social o un adiós al reflejo de una sociedad cambiante y muy extremista como la norteamericana. Dylan lo hizo con clase. Como han de hacerse las cosas en estos casos: poco a poco. Pero el 28 de agosto de 1964 las cosas cambiaron radicalmente para Dylan. En esa fecha se produjo una reunión que no tuvo mayor consecuencia sino la de la influencia sobre Dylan. Me estoy refiriendo al encuentro entre Bob Dylan y The Beatles en un hotel de New York. Conocer personalmente a los cuatro fabulosos fue la piedra de toque que Dylan necesitaba para abrir los ojos hacia un nuevo mundo de sonidos. The Beatles –expertos experimentadores musicales- le comentaron a Dylan las posibilidades que se abrían ante él en el futuro. Y sin duda eso fue lo que hizo decidirse.

Estamos pues ante un disco que llegó al puesto nº 6 en las listas del Billboard. Su productor fue Tom Wilson quien ya había trabajado con Dylan entre otros en “Another Side of Bob Dylan” y en “The Times They Are a-Changin´” ambos de 1964. Se divide en una parte acústica y otra eléctrica. En el lado eléctrico Dylan se hace acompañar de una banda de Rock and Roll, lo que encendió aún más a los folkies puristas. La canción que abre el disco “Subterranean Homesick Blues” supuso el primer single de Dylan que entró en una lista de éxitos. Y desde ese año, su amiga de toda la vida, Joan Baez, decidió no tocar más con él en vivo. Algo que no harían de nuevo hasta bien pasados unos años.

El disco también contiene dos gemas ya clásicas dentro del Folk-Rock: “Mr. Tambourine Man” que abre la cara B y el triste aunque embriagador “It´s All Over Now, Baby Blue” tema que sirvió de inspiración a la novelista Joyce Carol para uno de sus cuentos.

La edición que nos ocupa ha sido realizada por el sello holandés Music On Vinyl. Si por algo destaca este interesante sello es porque no dispone de los masters digitales remasterizados editados en CD para hacer sus prensajes en vinilo sino que recurre a los masters analógicos originales que las editoras poseen para pedir los consiguientes permisos y realizar en base a ellos estos prensajes de los masters en vinilo de 180 gramos la mayoría de ellos. Aplaudimos esta iniciativa pues todo audiófilo que se precie lo agradecerá. En definitiva el sonido del disco es realmente bueno. Los agudos y graves están bien balanceados y la brillantez de la copia se hace notar. Aparte de que hace décadas los discos pesaban menos, hay que recordar también que el cloruro de vinilo – en su estado natural es un gas y mezclado con otros elementos se encuadra dentro de la familia de los polivinílicos- de antes no era tan puro. Tenía muchas más impurezas lo que le hacía que el polvo y otros elementos se depositaran con más facilidad en su superficie. La electricidad estática siempre acompaña y va a acompañar a nuestros amados vinilos pero tenemos la ventaja de que en estos tiempos los materiales para la fabricación de los vinilos son de mayor calidad y en eso ganamos todos los amantes a la música pues esa electricidad estática tan molesta, en estos vinilos de 180 gramos, no es tan pronunciada como lo era en épocas pretéritas. 

viernes, 4 de diciembre de 2020

Nuevos tiempos para la lírica

 

Que una buena parte del cine actual de consumo rápido se ha convertido en una prolongación de ese bonus que te ofrecen en cualquier centro comercial, con cines, de este país como parte integrante de la visita al enorme reducto de ocio y entretenimiento en el que se ha convertido esta sociedad es un hecho, no por más plausible, menos aceptado por la mayoría de espectadores. O si no ahí están las cifras de "Vengadores: Endgame".
El que directores de la talla de Marin Scorsese afirmen en prestigiosos periódicos norteamericanos (The New York Times) que las películas de Marvel no son cine, no parece haber afectado a un público ávido de este tipo de experiencias cinematográficas. Y conste que no deja de tener su razón el maestro neoyorkino pues basa su argumento en que el cine nunca fue un ejercicio exento de riesgo. Razona el de Queens que hoy no hay riesgo alguno en la elaboración de proyectos. No existe ya la revelación creadora. El verdadero peligro emocional que supone la creación, puesta de largo y resolución de una película si en la actualidad solo se trabaja con cifras. No hay emoción. No hay aventura. Algo así como cuando la obligación de producir anula la pasión de crear.
En este sentido, las películas del universo Marvel y de cualquier otro universo, son exactamente eso: productos creados basándose en estudios de mercados, probados con audiencias (muchas veces de fans) siendo modificados en base a sus resultados. Sin duda, en un momento precario para la industria del cine como el actual (que se remonta ya años antes del dichoso coronavirus), este tipo de producciones de gran pirotecnia comercial son la única tabla de salvación para muchos empresarios que han visto como infinidad de colegas han tenido que cerrar sus salas. Si a eso le añadimos el contundente ascenso de las plataformas digitales, acabamos de dinamitar el sueño desde la base.
No obstante todo lo anterior, ¿Qué nos queda? Entretenimiento. Al fin y al cabo para eso se creó el cine.
Hay "lumbreras" hoy en día sin ningún sentido artístico, es cierto. Que solo ven los beneficios y les da igual cualquier otro planteamiento a excepción de la rentabilidad en taquilla. Por eso habría que diferenciar entre dos conceptos: entretenimiento y cine. Para mi, el universo Marvel es lo primero. Pero no por ello a veces se pueden vislumbrar luces brillantes en el horizonte más radicalmente comercial. Esta película las tiene. Y lo mejor que pueden hacer los protagonistas en esta historia es tomárselo un poco a broma. Y es ahí y no en otra parte, donde la película se hace ver. Gran aportación musical de los 1980s con canciones cuyos textos hacen alusión directa a la acción que se va desarrollando.
"Guardianes de la Galaxia" no será una gran película pero es un entretenimiento más que digno. Y con gran sonido e imagen por cierto en esta edición en Bluray.
Scorsese es uno de los grandes. Sin duda alguna. Pero a veces, de vez en cuando, también hay que desenchufarse del cine más serio para disfrutar como críos. No soy partidario para nada de continuar una saga enorme (más de 20 películas en esta fase y las que han de venir), atendiendo las directrices de las escenas post-créditos, siguiendo las tramas y sub-tramas de todos estos universos y sus pequeños micro cosmos, entre otras cosas porque todo ello te hace ser un esclavo de las directrices comerciales de todos estos chupa-sangres que son los nuevos directivos del séptimo arte que solo entienden de porcentajes, si que es cierto que algunas películas de Marvel se pueden (y deben) ver por separado no obedeciendo ninguno de estos esquemas perfectamente sincronizados para que tu mente y tu cuerpo respondan cual obrero obediente a su patrón.

miércoles, 18 de noviembre de 2020

LA MUERTE DEL FORMATO DE VÍDEO DOMESTICO

 

El mundo de los DVDs de venta ya pasó a mejor vida. Y ahora le está tocando a los BluRay y por consiguiente al casi recién lanzado formato de 4K HDR de alta definición. Me estoy refiriendo obviamente al mercado de las películas en venta en estos formatos.
Resulta un coste muy elevado hoy por hoy editar un film en BluRay sobre todo teniendo en cuenta que muchos espectadores se han pasado a las plataformas de streaming. Del orden de 40.000€ a 50.000€ es lo que vale editar con todas las legalidades una película de cine en formato BluRay y algo más en 4K.
Aquí pasa como lo que ocurrió hace años con la muerte del CD de audio en detrimento de estas plataformas y también, porqué no decirlo, de la cada vez más habitual costumbre de llevarnos la música con nosotros a cualquier parte a la que vayamos por obra y gracias del dios Spotify. ¿Quedó algo de todos aquellos "locos" que solían comprarse discos para escucharlos cómodamente en la habitación o el salón de su casa? Afortunadamente, si, ha quedado algo, y han sido las ediciones de nuevo de la música en el formato vinilo, un formato que quedó mucho más atrás del CD en cierta medida impulsado por el afán del sonido perfecto, sin frituras ni ruidos extraños típicos en discos de vinilo, que los sibaritas melómanos deseaban hacer por fin realidad. No fue el fin del CD. Aún se siguen vendiendo aunque en menor número. Pero lo que nadie esperaba, reitero, era la vuelta del vinilo. Y además como artículo de auténtico lujo ya que las ediciones de los vinilos actuales recogen fielmente, como nunca se hizo en este país, las ediciones tal y como fueron concebidas en las primeras ediciones originales. Ejemplos hay muchos: desde The Beatles a The Rolling Stones pasando por la E.L.O., Jimi Hendrix o The Who.
Ahora es un círculo de elegidos los que se pueden permitir el lujo de comprar todos los discos en formato vinilo de esos artistas con el simple objetivo de satisfacer sus necesidades de coleccionista acérrimo.

Con los BluRay y sobre todo con el 4K, está pasando lo mismo. Las plataformas tipo Netflix, HBO, Amazon, Disney, etc, hacen que la gente no se gaste ya un € en películas, llegando a convertirse estas ediciones en un objeto de colección igual que los maníacos del vinilo. Pero, ¿hasta que punto vale la pena acceder a estas plataformas y sacrificar el almacenaje sibarita de películas?

Tuve la experiencia reciente (hasta septiembre de 2020) de suscribir el paquete tope gama de Netflix pues quería experimentar por mi mismo la calidad tanto de imagen como de sonido. En lo referente a la imagen, ninguna queja. Incluso el 4K se ve bastante nítido y bien. El problema vino cuando comparé el sonido.

Tengo en casa un sistema de 5.1 con reproductor 4K, Dolby Digital y DTS y las comparaciones son simplemente odiosas. Y lo explico:
Mientras el canal central se usa para las voces, el diálogo en general de los actores, los canales delanteros son para los efectos, música, etc, y los traseros para efectos y música. Sin olvidar el subwoofer para efectos en frecuencias bajas. Pues bien, el diálogo procedía de todos los canales en general.
Más problemático era cuando oyes las voces de los actores, sobre todo, viniendo de los canales traseros. Y esto se debe a una simple cuestión de cantidad de datos de información. Netflix, siguiendo con el ejemplo y ya que es casi la nº 1 en este tipo de plataformas, pasó de unos cortitos 192Kbps, que era el standar que ha tenido hasta hace poco, a unos buenos (para ellos) 640Kbps. Claro, el sonido ha mejorado, pero sigue teniendo las carencias evidentes que os he comentado arriba. Si lo comparamos con el bitrate de un BluRay normalito, la caligrafía técnica nos dirá que posee un dato no inferior a los 1.500Kbps.
¿Y que pasa con esto? Simple: el sonido está realmente definido. Con 1.500Kbps tu puedes oír hasta el erupto más nimio de un caracol. Cada efecto, sonido, música y voz se escucha por donde se debe de escuchar, o sea, desde el canal que corresponde.

Ejemplo: en la serie de películas de Harry Potter (por cierto ya desaparecidas por el momento de Netflix) hay ciertos momentos en que los protagonistas miran hacia arriba. ¿Nos preguntamos porqué? Cierto. Algo ha pasado revoloteando alrededor de sus cabezas. Si las ves en Netflix te quedarías perplejo preguntándote porqué demonios han mirado hacia arriba Harry y sus amigos.

Otro ejemplo: en IT, la primera parte, cuando en la catarsis final, uno de los chicos protagonistas intenta hacer frente a los abusos de Pennywise, éste pasa (sin que lo veamos) por detrás del chico lo cual hace que el chico mire hacia atrás en la toma. Nosotros sentimos que detrás nuestra ha pasado alguien corriendo de un canal a otro. Sin embargo este tipo de situaciones sonoras, al menos por el momento, no se van a producir en el formato streaming ya que aún no trabajan con este nivel y calidad de sonido.

Para el espectador poco exigente, tal vez todo esto que estoy contando no le supongan más que estupideces o tonterías, pero si somos un poco exigentes con nosotros mismos y aceptamos que la obra artística debe ser contemplada y admirada en su integridad tal y como el artista y el elenco técnico la concibió, deberíamos tener en cuenta estos "pequeños" factores (para algunos) "básicos" (para el que suscribe).

Pero volviendo al tema de los costes de las ediciones de los BluRay, es cierto que hoy por hoy ya se editan cada vez menos y las ediciones que se hacen de muchas películas, debido a su excesivo coste, como mencionada, se están dejando en manos de editoras de dudosa catadura realizando unas ediciones que están más cercanas a la calidad DVD que a la del BluRay cuando muchas de ellas no presentan problemas en la reproducción al cambiar de capa.
Ejemplos y nombres: 7Art Pictures, Cinema International Media, Classic Media, Crin, Feel Films, Llamentol, Regasa Films, Sogemedia, Track Media o Undergorund Pictures.
Son solo algunas de las muchas editoras que actualmente venden sus productos que no son otra cosa que ripeados de películas originales. Incluso te las puedes encontrar en Amazon.
Yo aconsejo, siempre que tengamos oportunidad, leer las opiniones de los clientes que han comprado estas películas.
No creo que os encontréis con muy buenas críticas al respecto.

Y ¿Qué pasará con el 4K? Un formato que ha sido de los últimos en llegar a las grandes productoras y distribuidoras. Supongo que pasará como pasó con el ejemplo anterior del vinilo: se quedará para esos malditos sibaritas del sonido y la imagen que aún se han guardado un poco de su emoción de buenos aficionados al cine que lo único que desean es poder apreciar la obra con el mayor número de detalles y datos posibles. Tal y como fue concebida por su autor. Si eso es una locura, pues, bendita sea.

martes, 17 de noviembre de 2020

ENNIO MORRICONE

 

Ha trabajado con los grandes: Sergio Leone, Terrence Malick, Roland Joffé, Pedro Almodóvar o Quentin Tarnatino (con el que obtendría su único Oscar para "Los Odiosos 8").
Enfadado con la Academia de Hollywood, cuando se le preguntaba en alguna entrevista en el idioma de Shakespeare, él replicaba..."por favor, no me hable en inglés, hágalo en italiano".
Tuve la fortuna de conocerle personalmente y de estrechar su mano en los recordados y memorables Encuentros de Música de Cine en Sevilla, junto a Dulce Pontes.
Y aunque no haya recibido más que un Oscar (y otro más honorífico por toda su carrera pero no por una Banda Sonora en particular), no podrá olvidarse de sus David de Donatello, BAFTA, Grammys, Globos de Oro, Nastro d'argento y el Premio de Música Polar, entre otros.
"Bugsy", "La Misión", "Los Intocables", "Cinema Paradiso", "La Leyenda del Pianista en el Oceáno"o "Malena" serán bandas sonoras por las que siempre será recordado.
Desgraciadamente el maestro romano se nos fue el pasado 6 de julio de 2020 a la edad de 92 años. Una ausencia triste la que se va a producir este año cuando su Premio Princesa de Asturias de las Artes, que estaba previsto recibiera este mes de octubre junto a John Williams, sea tristemente póstumo.

Os dejo dos muestras de su música. Una de sus Spaghetti Western, "La Muerte Tenía un Precio", con el silbido de Kurt Savoy y la otra su aportación sonora bella y única a la epopeya melodramática de Sergio Leone en "Érase una vez en América".




lunes, 9 de noviembre de 2020

JOHN WILLIAMS

 

Cuando el joven Johnny Williams comenzó a componer Bandas Sonoras para series de TV allá por los años 1960s ("Cuentos Asombrosos", "Perdidos en el Espacio" o "El Túnel del Tiempo") nunca llegó a imaginar en lo que con el pasar de los años se convertiría.
Entre las doctrinas Clásica y el Jazz, el ya John Williams empezaría a alcanzar cierta relativa fama al ser el compositor de grandes taquillazos catastróficos como "Terremoto", "La Aventura del Poseidón" o "El Coloso en Llamas".
Pero nada comparado con lo que estaba por venir.
Año de gracia del señor de 1977. Un joven visionario californiano universitario, George Lucas, con buenos compañeros de pupitre como un tal Steven Spielberg, que había recibido un tímido éxito con la película "American Graffiti" en 1973, quería realizar algo más grande. Una gran epopeya galáctica que mezclara la ciencia-ficción con el western y las películas de aventuras. Nadie daba un duro por aquella fantasía imposible de realizar técnicamente.Ni la Universal ni la Walt Disney creyeron en el proyecto (lo que son las cosas: ahora Disney se hace la dueña de lo que queda por venir de la saga). Alguno incluso se atrevió a decir que..."en estos tiempos actuales la gente no está en absoluto interesada por las películas de ciencia-ficción". Pobres ilusos.Sólo un estudio apostó por el film: Alan Ladd Jr.,amigo por cierto de Lucas, desde 20th century Fox.
Lucas quería que la banda sonora fuese algo a la altura de su imaginería: una gran sinfonía galáctica. Llamó a John Williams pues siempre le vio con posibilidades de crear melodías sinfónicas después de escuchar sus trabajos en sus películas de catástrofes. Y dicho y hecho: Williams adaptaría como nadie el trabajo de los leitmotivs, inventado por Wagner para sus Óperas, para los temas de "la fuerza", "Darth Vader" o "La Princesa Leia".
A John Williams debemos agradecerle el que un músico de Cine volviese a recuperar la gran orquesta, olvidada como estaba en 1977 en favor del aún comercial esquema jazzistico.
La gran orquesta regresó para quedarse y gracias a Star Wars volvió a ser lo que siempre fue: sinfonías visuales. Desde los tiempos de los maestros Alfred Newman, Miklos Rosza, Bernard Herrmann o Erich Wolfgang Korngold. Algo que estaba es esa época totalmente olvidado.

Os dejo dos ejemplos bien diferenciados: uno es su gran apuesta por la sinfonía galáctica, por supuesto en "Star Wars" episodio IV, la primera en filmarse en 1977, y la música descriptiva de la batalla final en "La Estrella de la Muerte" . El otro es de una de sus películas de catástrofes. En este caso de tan solo tres años antes: "El Coloso en Llamas".
No voy a dar una lista de sus películas pero hay que recordar que Williams es el único compositor que ha ganado 5 Oscars de la Academia igualado tan solo por John Barry. Si no contamos obviamente con Alfred Newman (que obtuvo 9).
En octubre de 2020 recibirá el Premio Princesa de Asturias de las Artes junto a otro grande: Ennio Morricone quien, lamentablemente, lo hará en grado póstumo.
Siempre ha sido el músico de Steven Spielberg y es díficil imaginar una película de él sin la música de Williams.
Espero que las disfrutéis.




viernes, 6 de noviembre de 2020

NINO ROTA

 

Milanés de nacimiento y romano de despedida. Nino Rota es uno de los más grandes compositores que ha dado la madre Italia. Se decidió por la dirección de orquesta y por la música de Cine siendo muy joven. Músico habitual de directores como Federico Fellini ("La Dolce Vita", "8 y medio" o "Amarcord") cuya imaginaría visual es difícilmente imaginable sin su música, Luchino Visconti ("El Gatopardo") y Franco Zeffirelli ("Romeo y Julieta"). Francis Ford Coppola le llama para cubrir su staff de nombres puramente italianos para un proyecto que tiene sobre la historia de la mafia en América. "El Padrino" es un éxito mundial y su secuela, "El Padrino II", se corona como mejor incluso que su primera (¿quién dijo aquello de "nunca segundas partes fueron buenas"?) y gracias a ella obtiene su único premio Oscar en 1975 ganando la película un total de seis estatuillas de las once que tenía previstas.





martes, 3 de noviembre de 2020

DAVE GRUSIN

Me ha dado la "picá" de iniciar, con éste, una pequeña serie de artículos breves sobre los que considero algunos de mis músicos de Cine favoritos. Serán mis 10 compositores favoritos. No más. No menos.

Y quisiera comenzar por el gran músico y compositor norteamericano Dave Grusin. Y muchos de vosotros diréis, "pues vaya con el que ha empezado", posí, no os falta razón, pero quizás sea porque el maestro (jazzero donde los haya pero creador de muchas melodías de las más hermosas) cumple la friolera de 86 primaveras en 2020.

Como a muchos, el que le introdujo el gusanillo de la música fue su padre, que se dedicaba profesionalmente al violín clásico.

A Dave Grusin le debemos las bandas sonoras de películas como "Tootsie", "Campeón", "El Cielo Puede Esperar" (versión de Warren Beatty), "La Chica del Adiós" (Oscar para Richard Dreyfuss, por cierto), "Enamorarse", "Los Goonies" o la película por la que obtendría su único Oscar en 1988, "Un Lugar Llamado Milagro".

Os dejo un par de links para que podáis disfrutar con su música.


jueves, 10 de septiembre de 2020

¿Donde estás Donald?

 

Donald Fagen cuenta ya con 72 años pero en 2012 (hace ya la friolera de 8 años) nos encandiló de nuevo a todos con su "Sunken Condos". Este hombre, que vio marchar a su fiel compañero de fatigas, discusiones y elaborados manifiestos sonoros, Walter Becker, cuya carrera juntos en Steely Dan ha dejado un buen ramillete de no solo seguidores sino de influencias en otros grupos (Prefab Sprout, por ejemplo), ha grabado en solitario durante cuatro décadas ese mismo número de álbumes.
En 1982 el encantador "The Nightfly" con su "New Frontier" anunciándonos una era atómica un tanto improbable pero, que nunca se sabe.
En 1993 llegaría "Kamakiriad" con otro buen surtido de grandes canciones como la añorada "Snowbound".
Ya en 2006 llegó "Morph The Cat" con una edición por cierto que contenía el añadido de CD + DVD y una mezcla en 5.1 surround sound.
Y por fín (last but not least) el mencionado "Sunden Condos" en 2012 en el que volvía a sus raíces más rockeras.
No sabemos si esta nueva década nos sorprenderá con otro disco. Aún queda tiempo para que nos toque de nuevo la fibra con una buena selección de melodías elaboradas y textos gráficos y detallistas.




sábado, 15 de febrero de 2020

Wolfman Jack Show


Una voz peculiar. Única. Un autentico Hombre-Lobo del Rock and Roll. Wolfman Jack - Robert Weston Smith-, nació en enero de 1938 en Nueva York. Como muchos jóvenes de su generación, soñaba con ser un día un gran DJ radiofónico. Con 16 años ya empezó a hacer sus primeros pinitos en emisoras locales. Su gran influencia sin duda fue el gran Alan Freed, "Moondog", quien le sugeriría que estudiara en una academia. Y así lo hizo. Smith ingresó en la academia de radio de Washington D.C. al mismo tiempo que completaba sus estudios secundarios. Su primer trabajo le vino en 1960 para una emisora del estado de Virginia especializada en noticias. La WYOU. Pronto cambiaría de registro y convencería a los directivos de la emisora para realizar un programa donde presentaría música haciendo tres voces de otros tantos personajes diferentes. Un año después se mudaría a Louisiana donde entraría como DJ para la cadena  KCIJ. Pero Smith seguía buscando como perfeccionar su estilo. Hasta que en 1963 en la emisora mejicana XERF, creó y desarrolló su personaje de hombre-lobo Jack. Esta emisora tenía una potencia de 250.000W por lo que llegaba a todo el área sur de Estados Unidos. Gracias a su cobertura, El Wolf pronto sería requerido en Los Angeles y en 1966 era ya una estrella de la radio. Mudándose a Beverly Hills e incluso fue el motivo de canciones de solistas y grupos como Todd Rundgren, Leon Russell, Freddie King o Guess Who. Los primeros años 1970s no puedieron irle mejor al Wolf. Era requerido en infinidad de emisoras -su programa era sindicado, lo que significaba que podía ser emitido en otras radios simplemente con acuerdos de diferentes tipos- incluso apareció en la película "American Graffiti" de George Lucas en 1973. El Wolf llegó a ser escuchado en más de 2.000 emisoras, 53 países y más de 87 apariciones en televisiones y películas. 
Falleció en 1995 de un ataque al corazón.
Desde este rincón os proponemos su escucha ya que Wolfman Jack no es solo un icono de la radio-fórmula, cambiando la forma de hacerla por sus innovaciones y su peculiar manera de presentar música, sino porque con el tiempo se ha convertido en pieza fundamental de la historia de la radio musical.
"A little mordida here, a little mordida there". 

domingo, 9 de febrero de 2020

Onda Nazarena Radio

Onda Nazarena Radio fue una emisora online de contenido social creada para diferentes sectores sociales de la ciudad de Dos Hermanas, Sevilla en 2019. Estuvo activa desde junio de 2019 hasta febrero de 2020 y en ella pudimos hacernos eco de algunas propuestas culturales y de materia social con programas como "En Busca de Aliento" que ofreció una visión cercana y objetiva de la problemática de las enfermedades raras en la ciudad. Sin embargo, y como ocurre en otros ámbitos de la vida, la propuesta no obtuvo el respaldo institucional ni asociativo deseado por lo que, después de 8 meses de vida, se decidió dejar abierto solo el canal de audios desde la plataforma iVOOX desde la que aún se pueden descargar hoy sus contenidos y que a continuación os dejamos.



lunes, 3 de febrero de 2020

Camelot Radio



Camelot Radio fue una emisora de radio online que empezó en septiembre de 2008 y llegó a estar en funcionamiento hasta mayo de 2019. Durante ese largo período se realizaron más de 5.000 programas sobre todo musicales. Rock, Pop, Jazz, Clásica, Soundtracks, así como otros programas dedicados a la filosofía y la literatura. 
Tuvimos más de 100.000 descargas anuales y la audiencia llegó a alcanzar un máximo de 119 países. 
Os dejamos el link de iVOOX desde donde podréis descargar sus contenidos. 


viernes, 31 de enero de 2020

Un nuevo horizonte


La tecnología va avanzando. Lo que hasta hace poco creíamos autentico y único, al cabo de unos pocos meses ya ha quedado desfasado. Ha pasado con muchos avances en la historia de la humanidad. Cuando creíamos que el vídeo VHS o BETAMAX iban a convertirse en la gran revolución audiovisual del siglo XX apareció el DVD. Luego el Blu-Ray. Más tarde el HD 4K. Y así una larga lista de avances tecnológicos que se han ido produciendo a lo largo de los años. 
En los medios de comunicación ha pasado algo similar. Todos hemos pensado alguna vez que la radio y la televisión iban a permanecer perdurables en el tiempo sin cambios de ningún tipo. Incluso la forma de ver cine está ya cambiando en favor de plataformas de Streaming como Netflix, HBO, Amazon Prime o Sky TV. Aunque parezca algo extraño nos hemos convertido en sibaritas de elección "a la carta". Como si dispusiéramos en casa de 5000 películas para ver el día y hora que nosotros queramos, asimismo podemos ya elegir de cualquier película a través de estos canales. Eso sí, siempre previo pago por su uso. Y con la radio y la TV está pasando lo mismo: "Cartas" donde podemos disfrutar del menú: programas dramáticos, series clásicas, programas de cocina, debates, de moda, actualidad y un largo etcétera. Siempre con la facilidad de nuestra libre elección. 

En Estados Unidos, siempre un barómetro para todo este tipo de cuestiones tecnológicas, la audiencia de Podcasts tanto de programas de radio como de TV ya ha superado a la audiencia de emisiones convencionales que exigen del oyente o tele espectador, un compromiso de visionado en vivo si desea enterarse de algo concreto. Está claro que es importante asistir a una retransmisión deportiva, un debate o cualquier otro programa que requiera de una inmediatez informativa en vivo, pero cuando se trata de programas de índole cultural, social, musical o de contenidos no exigibles de la necesidad "live", preferimos los Podcasts. Y ahí es donde pensamos que el futuro dibuja ya hoy parajes de amplias paletas coloridas desde las que poder disfrutar de cualquier programa que deseemos para verlo o escucharlo a la hora deseada. 


Desde El Musikero Cinéfilo apostamos por esto último. Queremos ser una ventana desde la que todos vosotros podáis escoger los programas que más os interese escuchar. Casi todos musicales aunque también incluiremos otros más de contenido cultural sobre filosofía y literatura. 

Los años de experiencia en diferentes emisoras de radio nos han permitido introducirnos en programas musicales de toda índole y la idea de compartir todos esos años con vosotros era algo que ansiábamos hacer desde hace tiempo. 

En 2010 creamos la emisora Camelot Radio.es desde la que creamos más de un millar de programas musicales, gran parte de los cuales se podrán encontrar en nuestro Blog. 

En 2019 estuvimos a cargo de otra emisora online llamada Onda Nazarena Radio, en la localidad de Dos Hermanas, Sevilla, donde también nos hicimos eco de planteamientos de índole social desde el programa "En Busca de Aliento"

Todo ello y mucho más irá conformando este espacio dedicado a la multiculturalidad y sobre todo a la música en su vertiente más adoctrinadora para nuevas generaciones y mentes inquietas por descubrir y saber. 
Espero que el viaje sea todo lo reconfortante que te puedas permitir. 
Un abrazo y bienvenido. 

M.          

LA BANDA DE LOS PITOS

  La banda de los pitos, Ha llegado al pueblo. Unos tocan pitos pequeños, Agudos y puntiagudos. Otros tocan pitos grandes, Graves ...